sábado, 28 de diciembre de 2013

Mi regalo de Reyes.

Déjame perderme en tu mirada, porque en ella solo puedo ver la inocencia de quien solo conoce el cariño y el amor.






Déjame mecerme en tu sonrisa, porque emana tanta ternura que no deja a nadie indiferente.




Déjame sentir tus abrazos, porque cuando te tengo tan cerca el resto del mundo desaparece.





Hace dos añitos que estás con nosotros y aún me cuesta creer que una noticia que llegó tan inesperadamente se convertiría en alguien tan deseado y tan importante.




Tienes toda una vida por delante, con mucho que aprender y todo por descubrir, ilusiones que perseguir, deseos que realizar y sueños que conseguir, pero lo que debe estar siempre contigo es la pasión, descubrirás que con pasión todo lo demás llega de otra forma. La pasión te hará ser una persona diferente, una persona que destaque entre el resto. Hará que nunca pierdas las ganas de aprender y descubrir, tener ilusiones, deseos y sueños. A veces encontraras quien te tome por loco o inmaduro, huye de ellos, no oigas sus palabras ni sus reflexiones, da por seguro que ellos la dejaron de lado hace tiempo y sus vidas ya estarán vacías.




Pero no quiero correr tanto, aún es pronto. Ahora solo quiero disfrutar de tus primeras palabras, de  tus juegos, de tus carreras, con algún que otro traspiés, o de tu sorpresa ante un nuevo descubrimiento. El resto ya vendrá.




Quedan pocos días para el Día de Reyes, yo sé lo que pediré, quiero que mi regalo sea poder tenerte a mi lado para no perderme ni una sola de tus sonrisas, ni uno solo de tus abrazos.




Te quiero mi pequeño Diego.


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